Precalentar el horno a temperatura máxima.
En una lata ubicar los pimientos y la zarzaparrilla, llevar al horno por 25 minutos, cuidando de girar los pimentones para que se quemen de forma homogénea.
Sacar del horno y poner dentro de un contenedor hermético cubierto para terminar de cocinarlos. Retirar la piel de los pimentones y reservar.
En una licuadora procesar el pan hasta que quede una arenilla fina. Añadir los pimientos, la zarzaparrilla y nueces, y procesar hasta que gran parte se haya vuelto una pasta. Incorporar el resto de los ingredientes y mezclar hasta obtener una pasta homogénea.
Servir con pan plano o galletas.