Primero pelar los tomates y trozarlos en pedazos grandes. Reservar y picarla cebolla morada en cubos pequeños.
Calentar una olla con un chorrito de aceite de oliva y añadir los tomates y la cebolla. A continuación incorporar todas las especias en polvo, la pimienta, el azúcar rubia y una pizca de sal. Pelar y rallar el jengibre e incorporarlo a la mezcla.
Si quieres que el chutney de tomate tenga un toque picante, añadir el ají cortado en trozos pequeños. Para evitar que el ají pique en exceso, retirar las semillas y los nervios blancos. Si no te gusta el picante no echar ají.
Limpiar los physalis quitándoles las hojas y luego pasarlos por agua para eliminar posibles restos de tierra o polvo.
Dejar que la mezcla de chutney de tomate se cocine durante 50-60 minutos a fuego medio. Cuando hayan pasado 40-45 minutos, añadir los physalis. Dejar cocinar unos 10 minutos más y el chutney de tomate y physalis ya estará listo.
Se puede conservar en frascos de vidrio y puedes acompañarlo con lo que quieras; pastas, carnes, usarlo como aperitivo, etc.