Sep 17, 2021
De acuerdo al diagnóstico de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) sobre el impacto del cambio climático en la agricultura por factores como sequías e inundaciones, la disponibilidad de tierra apta para el cultivo y el recurso hídrico serán cada vez más escasos. Esta nueva realidad afectará a los rendimientos de los cultivos, por ende, se contará con frutas, verduras y hortalizas en menor cantidad e incluso distinta calidad. Además, se advierte sobre el aumento de las plagas y enfermedades en plantas que pondrán en riesgo la seguridad alimentaria en las zonas afectadas. “En Hortifrut nos tomamos este tema muy en serio tomando la responsabilidad de continuar ofreciendo fruta de alta calidad a todas partes del mundo y hemos estado trabajando arduamente con tecnologías que contribuyen a alcanzar ese objetivo”, comenta José Miguel Arizabalo, gerente corporativo TI de Hortifrut.
De acuerdo al experto, “en lo que respecta a Chile la agricultura inteligente ha estado avanzando durante los últimos años por la necesidad de adaptarse a la contingencia, destacando una fuerte aceleración, pero aún así, con menor desarrollo si comparamos con otras regiones como Europa, América del Norte e incluso con países de Latinoamérica”. Se observa una creciente ola de startups desarrollando tecnologías en el mundo agrícola, denominada como “corriente AgTech”, que han sido incentivadas, en parte, por programas de innovación y por el ejemplo de exitosos emprendimientos tecnológicos en el entorno local. Sin embargo, la mayoría de éstas se encuentra en etapa de prueba, por lo tanto, más que comercializar productos están buscando empresas agrícolas como socios con los cuales poder trabajar en conjunto para pilotear y servir de casos de éxito para luego comercializar los servicios tecnológicos.
Para Hortifrut la tecnología y la agricultura inteligente son pilares fundamentales para hacer sostenible y eficiente el crecimiento de las operaciones a nivel mundial. “En ese sentido ambas son palancas de nuestro programa de Transformación Digital, denominado Hortifrut Digital, y nos habilita a sostener nuestra posición de líderes mundiales en la producción y comercialización de berries”, señala Arizabalo.
La compañía aborda en tres frentes en el desarrollo de la agricultura inteligente:
Sistema de Gestión Agrícola
Agricultura de precisión
Automatización/robótica agrícola.
Cabe destacar que ya existen iniciativas en curso en cada uno de ellos, considerando desarrollos internos, implementación de tecnología co-desarrollada con start-ups tecnológicos agrícolas y convenios con empresas de clase mundial con soluciones especializadas en un nicho agrícola.
En relación a lo anterior, se pueden observar cinco tecnologías que son claves de considerar:
1. Telecomunicaciones: Como habilitador que permite la conectividad a internet en los campos. La mayoría de las tecnologías para la agricultura inteligente requieren poder interactuar en tiempo real con plataformas en la nube o dispositivos localizados a distancia, por tanto, sin internet esto se dificulta.
2. IoT (Internet de las cosas): Permite el acceso a tecnología con sensores inteligentes que son de tamaño reducido, inteligencia embebida y a un precio cada vez más competitivo, por tanto, se pueden incorporar en estaciones de riego, árboles frutales o incluso en frutos.
3. Drones o vuelos no tripulados: Captura gran cantidad de imágenes en buena resolución generando un material rico para ser analizado de forma rápida, sencilla y sin necesidad de tener que trasladarse al campo.
4. IA (inteligencia artificial): Procesa las distintas informaciones a través algoritmos para obtener conclusiones y proponer acciones tempranas para aplicar a los cultivos con el objetivo de mejorar las condiciones de estos.
5. Robótica agrícola: Para complementar la extensiva necesidad de mano de obra para labores rutinarias y repetitivas, enfocando los recursos humanos en actividades de mayor complejidad y valor agregado.
“Actualmente estamos trabajando en una iniciativa con drones logrando un mapa digital del campo donde se visualizan y proyectan índices claves para la gestión agronómica como son NDVI (índice de vegetación de diferencia normalizada), índice de stress hídrico, índice de clorofila, tasa crecimiento y estimación producción, entre otros”, explica José Miguel Arizabalo.
Seguir impulsando la transformación digital de la compañía y en general del sector agrícola son algunos de los objetivos de la compañía, manteniendo la posición de liderazgo mundial en la producción y comercialización de berries, maximizando el retorno a los productores y accionistas de Hortifrut, de la mano de la innovación que es parte del ADN de la compañía.
Respecto a los beneficios de implementar agricultura inteligente, Arizabalo destaca, “algunos de ellos son contribuir a desarrollar un negocio más sustentable, maximizar la productividad agrícola y lograr mayor eficiencia en el uso de los recursos involucrados en la producción agrícola”. La manera en que esto aporta a una agricultura sustentable se relaciona con el objetivo de aumentar la productividad para suplir la creciente demanda por productos agrícolas. En este sentido, la agricultura inteligente y la sustentable se vinculan para dar paso a la producción agrícola de la forma más eficiente y productiva al utilizar de forma adecuada los recursos disponibles y cuidando el medio ambiente.